Pearl Harbor, 70 años de dudas, Javier Yuste

El pasado 7 de Diciembre de 2011 se cumplió el septuagésimo aniversario del comienzo de la II Guerra mundial para los Estados Unidos de América, y durante largos años me he cansado de escuchar una y otra vez en bocas, tanto versadas como no, que el exitoso ataque nipón contra la base naval de Pearl Harbor, el cual supuso 2.335 bajas mortales, sin contar a los civiles, no fue más que una treta del Gobierno federal, encabezado por Franklin Delano Roosevelt, para entrar en liza. Cada vez que me cruzo con alguien que me afirma el hecho como una realidad incuestionable, lo mismo me da de viva voz tomando unas cañas que en el ciberspacio, se me pone el vello erizado ante tal barbaridad.

Así comienza un nuevo informe de nuestro colaborador, Javier Yuste (El Comandante del Navegante MP) en un nuevo número de la revista FDM. Tenéis el Dossier a vuestra disposición para descargar aquí, y para el que esté interesado en toda la revista sobre enigmas y misterio, puede descargarla desde su sitio web.

Una vez más, ¡Enhorabueba Comandante! por este nuevo artículo publicado en una revista.

7 comentarios en “Pearl Harbor, 70 años de dudas, Javier Yuste

  1. Desconozco todos los detalles del ataque,pero no puedo creerme que fuese una treta del propio país,más conociendo el cáracter americano…lo de J.F.K. ya es harina de otro costal.

  2. Existen abundantes pruebas de que fue una encerrona para entrar en guerra, tenian informes de la armada australiana, el mensaje de alerta llego por mensajeria normal y tendria que haber sido por via urgente, varias personas que trabajaban en el servicio de inteligencia lo mencionan, por no decir que algunos de ellos pensaban que Roosevelt pasaria a la historia como el presidente traidor y todo estadounidense de bien maldeciria ese apellido si se lo recordaban, pero estava claro que se confundieron.

  3. Lo que yo creo es que fué un caso de descoordinación entre diferentes servicios, suerte, la hasta entonces creencia jactanciosa de que nadie osaría atacarles, y fallos garrafales.
    Roosvelt adoraba la Armada, hasta el punto que cuando habia reuniones de alto nivel en las que participaban los más altos mandos de Ejercito y Marina solía referirse a la Navy como «nosotros», entonces Marshall, jefe del EM del ejercito le recordaba que era el presidente y jefe de ambos brazos de la defensa y no estaba allí en calidad de marino.
    Y segunda y más importante reflexión, ¿no hubiera bastado con esperarlos y recibirles con un muro de fuego, la flota dispersa y no dejar que te hundan la flota de acorazados? Con eso basta para justificar la entrada en guerra.
    También sé que los portaviones estaban fuera, pero recordad que no habian ido a buscar al NIMITZ proviniente del futuro, sino que llevaban cazas a Wake y Midway. Y como bién dice Javier, hasta ese momento la «prima donna» eran los acorazados, por lo tanto pensar que el sacrificio incluía el grueso de la flota para mí es descabellado. Sin contar con las perdidas humanas.

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