Los Sitios de Castelnuovo y Malta

Los tercios, unidad de élite de la Monarquía Hispánica, cuentan con una larga e impresionante hoja de servicios durante los siglos XVI y XVII. Si famosas son sus intervenciones en Flandes y Alemania, quizás sus periplos por el Mediterráneo no son tan conocidos, pero en estas aguas y las tierras que bañan fueron protagonistas de batallas y asedios que impresionaron a sus contemporáneos.

Centrado en dos asedios en el gran mar, Ediciones Salamina publica Los tercios en el Mediterráneo. Los sitios de Castelnuovo y Malta, de Hugo A. Cañete. El libro está dividido claramente en dos partes que cuentan ambos asedios, y cada una lo hace de manera muy diferente.

La primera de esas partes se centra en el sitio otomano a Castelnuovo (actual Herceg Novi en Montenegro). Los tercios en el Mediterráneo es, en estos compases, un ensayo bibliográfico sencillo y sucinto. En poco más de 50 páginas, Hugo A. Cañete ofrece un recorrido por la batalla de Préveza (1538, frente a la isla de Léucade, en el oeste de Grecia), la toma de Castelnuovo por el bando cristiano, la disolución de la Liga Santa y el sitio otomano a la plaza recién conquistada.

Se trata de un gran ejercicio de síntesis que en absoluto es parco en detalles. Esas 50 páginas son más que suficientes para comprender a la perfección la campaña de 1538 y los problemas que generó la toma de Castelnuovo, que fue ocupada por los españoles en contra de lo acordado entre los coaligados, lo que soliviantó a los venecianos.

Finalmente, esta primera parte relata el sitio otomano de Castelnuovo, defendido hasta el último hombre por el tercio de Sarmiento. Fue, sin lugar a dudas, uno de esos choques que quedan en la memoria por generaciones, y el autor hace un magnífico trabajo al contarlo. También enlaza, brevemente, con lo sucedido después hasta el sitio de Malta.

De aquí en adelante Los tercios en el Mediterráneo se convierte en algo muy diferente. Empieza el asedio otomano a Malta y el libro da paso a una crónica, la de Francisco Balbi de Correggio, que cuenta el choque de inicio a fin. Pero Hugo A. Cañete no presenta la obra sin más, sino que la comenta, la amplía y la adapta para mejor comprensión del lector.

Siempre he defendido que para comprender bien cualquier conflicto es necesario leer diarios de guerra y, en no pocos sentidos, pero salvando las distancias, estas crónicas de la Edad Moderna se asemejan a los diarios. Merece mucho la pena leer estos escritos, el problema es que no siempre son accesibles para el gran público incluso aunque estén en tipografía moderna: términos en desuso, una riada de personajes que en el siglo XVI no necesitaban presentación pero ahora sí y otro tanto con eventos que se nombran sin contexto.

El autor pone en negrita las fechas para facilitar el seguimiento cronológico del sitio de Malta, en gris claro las palabras originales de Balbi que llevan un comentario y estos comentarios claramente distinguidos van en cursiva. El resultado, a todas luces, es fantástico. Hugo A. Cañete ha conseguido hacer accesible la crónica a todo tipo de lectores, y además le ha dado varias capas de contexto con otras fuentes a lo que, de otro modo, sería una visión incompleta.

A pesar de estas dos partes tan diferenciadas del libro, Los tercios en el Mediterráneo se lee con facilidad y sin sensación de desconexión. El lenguaje es siempre sencillo y tiene un buen ritmo que no cortan los comentarios en la crónica de Balbi. También contiene un completo apartado cartográfico hecho por el autor, ilustraciones y una tabla con las coordenadas de los lugares en los que se desarrollaron los choques.

Es una fantástica noticia que autor y editorial hayan apostado por esta forma de contar la Historia por cómo facilita al gran público una crónica, elemento esencial a la hora de reconstruir el pasado. Los tercios en el Mediterráneo es una obra fundamental para conocer dos de las mayores intervenciones de esta unidad de élite en el mar, y que consigue ser accesible y atractiva tanto para aficionados como para historiadores.