Adolf Galland está considerado como uno de los más grandes ases de la aviación militar durante la Segunda Guerra Mundial, su figura va asociada al derribo de más de cien aviones enemigos alcanzando a los treinta años el grado de general, estamos pues ante uno de los mejores pilotos de la Luftwaffe alemana. Su trayectoria fue desde luego impresionante, su dominio del pilotaje y su pasión por el arma aérea condujeron inalienablemente hacia una carrera de éxitos, como así sucedió, independientemente de que al final la guerra la perdiese la Alemania de Hitler.
Las memorias que yo he podido leer son las publicadas allá por los primeros años 50 por la mítica editorial AHR, una de esas editoriales que contienen verdaderos tesoros escritos sobre la Segunda Guerra Mundial y sus personajes. Así pues, nos encontramos ante un trabajo memorístico que abarca desde los comienzos de Adolf Galland en aquellos vuelos sin motor, hasta el final de la Segunda Guerra Mundial en 1945 con la derrota final de Alemania. Sigue leyendo