How Europe went to war in 1914
Europa se encontraba en paz aquel domingo 28 de junio de 1914, cuando el archiduque Francisco Fernando y su esposa Sofía Chotek cayeron en Sarajevo bajo las balas de Gavrilo Princip, un joven nacionalista y revolucionario serbobosnio. Poco más de un mes después todo el continente se encontraba en una guerra que movilizó a 65 millones de hombres y dejó 21 millones de muertos y heridos, es decir, un tercio de los participantes, una masacre sin precedentes en la historia de los conflictos humanos. La guerra trajo tempestades impredecibles: dos imperios europeos se hundieron, una revolución estalló en el seno de uno de ellos, Estados Unidos intervino para decidir la contienda en medio del agotamiento suicida de las naciones europeas y ya no volvió a marcharse, dictando desde entonces buena parte de la historia del Viejo Continente, ante la mirada atónita de los que habían sido señores del mundo. Las heridas causadas por la matanza no se cerraron en 1918, tras la firma de la paz, sino que continuaron abiertas a lo largo de veinte años hasta el estallido en 1939 de otra guerra aún más devastadora y criminal, provocada por las presuntas víctimas de la primera, la derecha alemana. La Gran Guerra fue, pues, el acontecimiento seminal de ese siglo de las catástrofes y las ilusiones (en el amplio sentido del término) que fue el XX, nuestro siglo por más que le saliera un palito cibernético después hasta convertirse en el XXI. Sigue leyendo